La ciudadela de Machu Picchu es, probablemente, la construcción arquitectónica más importante del imperio Inca, rodeada de un vasto bosque tropical, fue edificada en el gobierno del Inca Pachacútec.
El nombre de Machu Picchu proviene del quechua, que significa “Montaña Vieja” (“Machu” que es “Viejo” y Picchu “Montaña”).
En la actualidad, la zona arqueológica de Machu Picchu es el principal atractivo turístico del Perú, siendo este de visita obligatoria para todo aquel que llegue al país.
La zona arqueológica de Machu Picchu está ubicada en la Cordillera Oriental del Sur del Perú, a 2.430 metros de altura, en el margen izquierdo del Río Vilcanota sobre el Valle Sagrado de los Incas.
El distrito de Machu Picchu, provincia de Urubamba, se encuentra a 112.5 km al noreste de la ciudad del Cusco.
La ciudadela de Machu Picchu fue construida a mediados del siglo XV, en el gobierno del inca Pachacútec (principal extensor del imperio incaico), la cual sirvió, probablemente, como su residencia y centro religioso. Este importante recinto fue abandonado con la llegada de la colonización española.
Fue redescubierta por Hiram Bingham, historiador y profesor de la universidad de Yale, en 1911. En una expedición en la ciudad del Cusco, acompañado del campesino Melchor Arteaga llegó a la zona arqueológica quedando asombrado por la construcción de caminos, terrazas agrícolas, almacenes, entre otros. Todo estaba cubierto por una densa vegetación propia del lugar que evidenciaba el paso del tiempo.
La ciudadela inca fue presentada al mundo en el año de 1913, convirtiéndose en un importante atractivo turístico. Año con año la popularidad de Machu Picchu ha ido creciendo, fue así que el 9 de diciembre de 1983 fue declarado por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad. El 07 de julio del 2007 se convirtió en una de las 7 Nuevas Maravillas del Mundo.
El Santuario Histórico de Machu Picchu no solo es de gran importancia cultural, sino que también posee una gran biodiversidad, al estar ubicado entre la ceja de selva y la Cordillera de los Andes.
Dentro del Santuario Histórico de Machu Picchu existe una amplia variedad de flora, ya que se conoce que existen más de 400 especies distintas de plantas, entre las que destacan las orquídeas, bromelias, helechos y floripondios, entre otros. Además de poseer árboles nativos como la q’euña, pisonay, cedro, entre otras
La fauna que habita Machu Picchu también es muy diversa, se puede encontrar desde mamíferos como el Oso de anteojos, el Venado enano y Zorro andino, entre otros. Machu Picchu es un lugar que es el hogar de su
En el Santuario también se puede encontrar diversidad de aves, entre las que destaca el Gallito de las Rocas (Rupicola peruvianis), ave nacional del Perú desde 1941. Machu Picchu cuenta con una inmensa biodiversidad, por lo que es considerado uno de los mejores lugares para la observación de aves (birdwatching). Entre las aves que habitan este sitio se encuentra el Condor Andino (Vultur gryphus), el Arrendajo verde (Cyanocorax yncas), el pescador canela (Pyrrhomyias cinnamomea) y más.
Ollantaytambo es la ciudad más cercana a Machu Picchu, ubicada en el Valle Sagrado de los Incas. Ollantaytambo es un paso obligatorio para todo aquel que quiera visitar el Sitio Arqueológico de Machu Picchu.
Además de Ollantaytambo, está el pueblo de Aguas Calientes o Machu Picchu Pueblo, que se encuentra a solo 25 minutos en bus de la ciudadela de Inca. Está ubicado en la parte inferior de Machu Picchu, a orillas del río Urubamba, con una población no mayor a los 5000 habitantes.
El clima en la Ciudadela de Machu Picchu, como en Aguas Calientes, es cálido debido a que se encuentran en la selva de ceja de territorio peruano. Posee un clima tropical, lo que lo hace cálido y húmedo durante el día y con un ambiente fresco en las noches.
Machu Picchu fue construida entre 2 fallas geológicas, por ende es propensa a sufrir de varios movimientos sísmicos, sin embargo, la arquitectura con la que se diseñó no permite siquiera un leve movimiento entre las piedras.
Entonces podríamos decir que Machu Picchu es a prueba de temblores o terremotos, sus más de 500 años en pie es prueba de la resistencia del lugar.
Machu Picchu es, sin duda alguna, una gran obra de ingeniería hidráulica, los incas tuvieron que ingeniar la manera de como trasladar, almacenar, distribuir y evacuar el agua de la ciudadela.
Se construyó un canal de 749 m de longitud con una inclinación del 3%, tenían 16 fuentes para distribuir el agua en cada sector del lugar, y la inclinación permitió que el agua fluyera continuamente en cada temporada del año.
El Templo del Sol es el sector más importante dentro de la zona arqueológica, ya que rinde tributo a la deidad más relevante de la cultura inca. Fue construido de forma circular, con ventanas y hornacinas, todo decorado con oro y plata.
Este significativo espacio también tuvo la función de observatorio astronómico para determinar el cambio de estación y la llegada de cada solsticio, gracias a la posición estratégica de las ventanas.
El Templo de las tres ventanas es, probablemente, uno de los lugares mejor trabajados de toda la ciudadela. Esta construcción consta de un muro de 10 metros de largo por 8 metros de ancho con 3 ventanas trapezoidales que tienen una vista panorámica de las montañas Huayna Picchu y Putucusi. Fue un espacio importante en el que se realizaban ceremonias religiosas y de culto.
El Intihuatana, que en quechua significa “donde se amarra al Sol”, sirvió como una herramienta de observación astronómica y calendario. Además de que tuvo funciones ceremoniales en ciertas actividades religiosas dentro de la ciudad.
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Además, las agencias de viajes suelen ofrecer paquetes que incluyen transporte, alojamiento y actividades adicionales, lo que simplifica considerablemente la planificación del viaje y a menudo resulta en ahorros financieros.
Otro beneficio clave es el acceso a información privilegiada y a experiencias exclusivas. Las agencias suelen proporcionar acceso a guías expertos que ofrecen información detallada sobre la historia y la cultura de Machu Picchu, enriqueciendo así la visita.
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Pasajeros felices
