El Camino Inca es una vía hecha con piedra que serpentea por los valles y montañas de los Andes. En esta ruta se encuentran muchas construcciones Incas, como torres de observación ubicadas en lo alto de las montañas, pequeñas aldeas, andenes de cultivo y otros conjuntos arqueológicos, todos construidos con material lítico (piedra).
El Camino Inca, una de las aventuras paisajísticas más deslumbrantes de la tierra En sus más de 60 mil kilómetros tiene seis rutas de uso turístico para los amantes del trekking.
El famoso Camino Inca a Machu Picchu es una ruta de trekking mundialmente conocida, por este motivo debe hacer la reserva de boletos con mínimo 6 meses de anticipación
Esta ruta atraviesa restos arqueológicos de apabullante belleza escénica como el Wiñayhuayna, que lo abstraerán de la a veces complicada realidad.
Esta ruta es una de la más conocida después del Camino inca a Machu Picchu, con una duración de 5 días, recorre espectaculares paisajes en sus 60 kilómetros de longitud hasta llegar a la ciudad inca de Machu Picchu.
Muchos de los viajeros que ya han experimentado este trayecto comentan que la experiencia fue incluso superior a la que esperaban con el Camino Inca, ya que esta caminata ofrece una ruta más larga y desafiante.
Choquequirao conocida como «La hermana menor de Machu Picchu» es una fortaleza ubicada en una zona alejada de los Andes peruanos, y es precisamente esto lo que hace que su ruta sea increíble de caminar.
Este tour tiene una duración promedio de nueve a diez días, en los cuales se explora la ciudadela de Choquequirao y se finaliza en el pueblo de Aguas Calientes, para luego subir a la ciudadela inca.
El camino inca por el Valle de Lares es una experiencia increíble. Esta ruta sigue un antiguo camino utilizado por los incas, rodeado de valles, ríos, lagunas, cascadas, es la mejor forma de conocer la geografía de los Andes.
Atravesar el Valle de Lares hasta Machu Picchu, dura aproximadamente de cuatro a cinco días. Esta ruta no es muy conocida y es probable que existan pocos operadores turísticos disponibles.
La conservación del Camino Inca es crucial para preservar este tesoro histórico y natural. Mediante programas de mantenimiento y educación ambiental, se protegen los senderos milenarios de la erosión y la degradación. Además, se promueve el turismo responsable, fomentando el respeto por el entorno y la cultura local.
Con la participación activa de autoridades, comunidades y visitantes, se garantiza que las futuras generaciones puedan disfrutar de la majestuosidad de estos caminos ancestrales.
Pasajeros felices