Misterioso monolito de gran tamaño, conocido por sus intrincados relieves que representan paisajes, animales y elementos de la Cultura Inca.
COMUNICADO
Hemos recibido notificaciones, en la cual nos alertan que delincuentes están usando el nombre y RUC de nuestra empresa CuscoPeru.com, informamos que nosotros no recibimos pagos por servicios electrónicos o a fines.
No se deje sorprender, no realice depósitos a cuentas que no estén vinculadas a nuestro RUC, ni comunicaciones que no sean de nuestros números oficiales (984 709 080) (930 202 155)
CuscoPeru.com es una empresa operadora de Turismo, No brindamos otros servicios que no sean de turismo.
El conjunto arqueológico de Saywite, se localiza en el distrito de Curahuasi, provincia de Abancay, del departamento de Apurímac
Saywite está geográficamente muy cerca de dos importantes ciudadelas: Machu Picchu y Choquequirao.
Para la cultura de los Incas, Saywite pudo haber sido un centro ceremonial donde se rendía culto al agua, pero también debe haber sido un centro de “capacitación” donde los hidráulicos incas aprendían las diferentes opciones de ingeniería en condiciones de costa y sierra.
Para algunos estudiosos se trata de una original representación de la visión cósmica de la cultura inca, que ha dejado esculpidas y perennizadas algunas de sus más notables concepciones religiosas sobre los problemas del agua y de la fertilización de las tierras.
Es una maqueta del mundo cósmico de los incas, asociado al agua, la fertilidad de las tierras y las fuerzas comprometidas en su existencia.
El mundo andino, concebía la vida como un todo nada era aislado y el uso que hacía de sus recursos era un uso basado en el respeto a sus divinidades, los astros: el Sol y la Luna (Inti y Quilla) y a los recursos naturales: suelo y agua (mamapacha y yacumama) e incluso los seres inanimados eran venerados como una muestra de respeto a los Andes: los cerros (apus). Tenía una visión integrada de cómo gestionar los recursos y una muestra es el monolito de Saywite, donde representaron las principales estructuras hidráulicas que encontramos como vestigios de su gran conocimiento de las cuencas asociados a la divinidad y a su visión del mundo.
El monolito de Saywite es “una fuente simbólica”, representada en un bloque lítico en el cual existen más de 208 figuras talladas en alto relieve entre animales y estructuras, adaptándose a las sinuosidades naturales de la propia roca.
Una muestra más de la genialidad inca, que nos hace pensar que estos lugares al igual que Moray eran centros de entrenamiento y de capacitación en el uso de la tecnología para una casta privilegiada que hacia posible la ejecución de las grandes obras hidráulicas que nos han dejado en señal de su sabiduría que la ciencia actual aún no ha superado.
El monolito de Saywite, se encuentra representado en las monedas de colección 2016 trabajadas por el Banco Central de Reserva del Perú.
Pasajeros felices